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Los directores de las escuelas de todos los niveles de enseñanza son siempre reconocidos por su capacidad de liderar con efectividad, contribuyendo al éxito de su personal escolar, estudiantes y familias.Un día normal en la vida de un director de cualquier centro escolar está lleno de emergencias y decisiones de último momento y otros tantos desafíos que se presentan muchas veces antes de que la mayoría de las personas se despierten para comenzar sus días. A veces, el trabajo puede ser ingrato, pero los directores avanzan con un objetivo común: hacer posible que los niños a los que ellos supervisan tengan la mejor educación posible. A continuación resumimos las 10 habilidades principales que todo director de escuela debe tener para administrar una escuela de manera eficiente.
El trabajo de un director puede salirse de control rápidamente, pero los líderes calificados de todo el mundo comparten algunos rasgos en común.
10) Evaluar y manejar riesgos
Los directores deben tomar decisiones en una fracción de segundo mientras evalúan los costos y los beneficios de sus acciones. Tienen que calcular diferentes escenarios y posibles resultados. Los directores exitosos siempre están mirando hacia el futuro, tratando de prever con anterioridad tanto los riesgos como las oportunidades que afectan a sus escuelas.
9) Manejar el arte de Escuchar
Perfeccionar el arte de escuchar significa poder ver cosas más allá de su punto de vista y verificar su propia comprensión de las cosas. Los directores exitosos se enfocan intencionalmente en escuchar y comprender las cosas desde la perspectiva de otra persona. La escucha activa es una de las mejores habilidades que un director puede cultivar y usar.
8) Gestionar sus prioridades
Es fácil dedicar una gran cantidad de tiempo y energía a tareas que no son importantes si no tienes prioridades claras. Cuanto mejor pueda un director priorizar las cosas que deben hacerse, mejor podrá enfocar sus esfuerzos en las cosas que más les importan a sus estudiantes y profesores.
7) Empoderar a los demás
Los directores exitosos ven la grandeza en los demás y hacen lo que pueden para sacar cultivarla. Los profesores y el personal crecen como líderes cuando se apropian de sus decisiones, se responsabilizan por las decisiones que toman y los resultados que se obtienen, y tienen experiencia de primera mano sobre las consecuencias de sus acciones. Pregúntele a un director fuerte y él / ella le dirá que es parte de su trabajo como líder ayudar a su gente a convertirse en los mejores.
6) Delegar las tareas
Por naturaleza, los líderes fuertes tienden a predicar con el ejemplo, con una tendencia a querer hacer las cosas por sí mismos, pero es importante aprender a delegar. Los beneficios de delegar incluyen un mejor control de la carga de trabajo, desarrollar las habilidades básicas de su personal y permitir que su equipo cumpla sus objetivos más rápido, produzca los mejores resultados y lo ayude a realizar más tareas de las que haría por su cuenta.
5) Actuar con decisión
Los directores efectivos se toman el tiempo para asegurarse de que comprenden completamente los problemas que enfrentan y responden tomando medidas firmes y decisivas sin cuestionarse demasiado. Esta habilidad se puede lograr equilibrando los impulsos que provienen de la impaciencia (o de reaccionar sin pensar) y pensar demasiado y retrasar la acción.
4) Motivar el cambio
La forma más rápida de crear una escuela donde los profesores y el personal estén estancados es fomentando un entorno que se base en la idea de “Si no está roto, no lo arregles”. Un papel clave en la vida de un director es ser persistente en la motivación constante del cambio. Esto significa un cambio para la escuela, el personal, los estudiantes, los padres y las comunidades vecinas.
3) Comunicarse con claridad
Nada hace que el rendimiento sufra más que la comunicación poco clara. No importa si se trata de un miembro del personal, un grupo de docentes, un padre o un estudiante, la audiencia no podrá hacer lo que se necesita si no saben lo que está tratando de comunicar. La comunicación sólida es uno de los elementos fundamentales para ser un directivo exitoso.
2) Promover su visión
La labor principal del director es dirigir el entorno escolar. Para ello debe dejar clara cuál es su visión, no solo al personal, padres y estudiantes, sino también a sí mismo. Crear y promover una visión clara y definida de adónde quiere que vaya su escuela, así como un recordatorio constante de estos objetivos, conlleva a que los implicados también hagan suya esta meta y programen tareas para lograrlo. Cuando esto se logra, no solo todos están más motivados, sino también más efectivos, ya que sus responsabilidades permanecen conectadas con sus objetivos estratégicos y su visión.
1) Educador primero / Director segundo
Es fácil concentrarse en las metas profesionales, las responsabilidades diarias, los presupuestos escolares y mucho, mucho más. Como director, se es responsable de muchas cosas, pero no puede olvidar que todo líder escolar es por naturaleza primero un educador. Los directores exitosos mantienen su enfoque en el éxito de sus estudiantes. De esta labor básica dependerá el éxito de la familia y la comunidad.. No puede convertirse en un director sólido si no se concentra en sus estudiantes.
Un gran líder no necesariamente es quien hace grandes cosas, sino quien logra que otros las hagan. Cultivando y recordando en cada paso del camino estas 10 habilidades, cualquier director tendrá asegurado el éxito. Ser un buen líder es mantenerse constantemente revisando su manera de actuar y poniéndose metas para ser cada día mejor. De eso depende el éxito y el futuro de nuestra sociedad.
